Renuncia tercer ministro de Salud de Ecuador en plena vacunación contra la COVID-19

El ministro de Salud Pública de Ecuador, Rodolfo Farfán, presentó el 19 de marzo la renuncia irrevocable al cargo que ejerció apenas 19 días, en pleno proceso de vacunación contra la enfermedad del nuevo coronavirus (COVID-19) del país sudamericano, confirmó la Presidencia.

La Secretaría General de Comunicación (Secom) de la Presidencia confirmó la renuncia de Farfán, quien fue el cuarto ministro de Salud del actual gobierno y el tercero en renunciar durante la pandemia de la COVID-19.

“Por motivos estrictamente personales me veo precisado a presentar la renuncia irrevocable al cargo de ministro de Salud Pública”, señaló Farfán en su carta de dimisión presentada este viernes al presidente ecuatoriano, Lenín Moreno.

“Agradezco a usted señor presidente la confianza dispensada al haberme permitido servir al país, desde la esfera pública, en estos momentos de profunda sensibilidad”, agregó el también médico de profesión.

Farfán fue designado para el cargo el pasado 1 de marzo en reemplazo de Juan Carlos Zevallos, quien también renunció al Ministerio en medio de cuestionamientos por presuntas irregularidades en el plan de vacunación y tropiezos en su ejecución.

La renuncia de Farfán surge en momentos de agitación social por irregularidades en el plan de vacunación iniciado el 21 de enero pasado y el escándalo por una lista de personas importantes vacunadas, ajenas a la primera línea en la lucha contra la pandemia.

El escándalo llevó a la Fiscalía General del Estado a allanar el pasado día 17 las instalaciones del Ministerio de Salud, en Quito, como parte de diligencias relacionadas al proceso de vacunación dentro de una investigación abierta el 29 de enero pasado.

En el caso se investiga al ex ministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, así como a otras personas por presuntos delitos contra la administración pública.

Zevallos, quien ejerció el cargo casi un año, renunció el 26 de febrero, y un día después salió del país hacia Miami, Estados Unidos.

El exministro enfrenta un proceso judicial por el presunto delito de tráfico de influencias en el reparto de vacunas contra la COVID-19, para beneficiar a personas ajenas a la primera línea en la lucha contra la pandemia, así como a familiares como su propia madre, residente en un centro de gerontología privado de Quito, además de personas cercanas al gobierno.

El Ministerio de Salud cuenta con un registro detallado de las personas vacunadas, “lo que hace presumir que existe información que ha sido ocultada”, según investigaciones de la Fiscalía.

La institución recaba información sobre el plan de vacunación y la lista de beneficiarios de las Fases 0 y 1, debido a que en tres ocasiones se ha remitido una lista “incompleta”, es decir, “sin nombres de las personas que han sido vacunadas y son de conocimiento público”.

La vicepresidenta ecuatoriana, María Alejandra Muñoz, respaldó el jueves la acción de la Fiscalía, al afirmar que toda la información sobre el proceso de vacunación debe estar “en manos de la autoridad competente”.

Ecuador, que avanza de manera lenta su plan de vacunación, acumuló hasta el jueves 307.429 casos de la COVID-19 desde el inicio de la pandemia en el país, así como 11.528 decesos confirmados.