INTERNACIONALES
Hallan muerto en su celda en Estados Unidos al Unabomber
El terrorista Theodore Kaczynski, conocido como “Unabomber”, fue hallado muerto este sábado en su celda en una cárcel federal de Carolina del Norte, confirmó un portavoz del Buró Federal de Prisiones.
De acuerdo a un reporte de EFE, la fuente no indicó la causa de la muerte de Kaczynski, de 81 años. El hombre cumplía cadena perpetua por haber matado a tres personas y herido a otras 23 con una serie de cartas bombas a universidades, aerolíneas y otras empresas entre 1978 y 1995.
Precisamente, el sobrenombre de “Unabomber” viene del apodo de “University and Airline Bomber” (bombardero de Universidades y Aerolíneas) que el FBI (siglas en inglés de la Oficina Federal de Investigación) usaba para referirse a él.
Kaczynski se dedicó a colocar o enviar bombas durante 17 años hasta que fue capturado en 1996.
El terrorista murió en el centro médico de la prisión federal de Butner, en Carolina del Norte, a donde había sido trasladado en 2021 debido a su mal estado de su salud. Anteriormente había cumplido condena en la prisión de máxima seguridad de Florence, en Colorado, conocida por tener las condiciones más duras de Estados Unidos.
¿Quién era el Unabomber?
La historia del Unabomber capturó la imaginación del público estadounidense y mundial en la década de 1990.
Kaczynski era un genio de las matemáticas que ingresó en la Universidad de Harvard con solo 16 años. Al llegar a los 25 ya era profesor asistente en la prestigiosa universidad de Berkeley. Sin embargo, dejó la vida académica y, a principios de la década de 1960 se alejó de la civilización para vivir en una cabaña en una zona rural de Montana, donde no tenía agua corriente, se iluminaba con velas que hacía él mismo y vivía a base de cazar conejos.
Precisamente desde esa cabaña, Kaczynski empezó a enviar explosivos como forma de rechazar el papel de la tecnología en la civilización. Él mismo preparó su alegato contra la tecnología en un manifiesto de 35.000 palabras que The Washington Post y The New York Times publicaron en 1995 por petición del Gobierno, pues Kaczynski había prometido “desistir del terrorismo” si se difundían sus palabras.
Muchas de sus víctimas perdieron los dedos de las manos al abrir las cartas con explosivos.
El hecho de que la violencia fuera tan aleatoria provocó un gran nerviosismo en la sociedad estadounidense. Kaczynski acabó siendo arrestado en 1996, se declaró culpable dos años más tarde y fue condenado a cadena perpetua sin la posibilidad de salir en libertad condicional.