Santo Domingo, R.D. – La falta de resultados efectivos en la gestión del ingeniero Milton Morrison al frente del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT) ha obligado al Gobierno a intervenir directamente con un paquete de 143 medidas destinadas a reducir el congestionamiento vehicular que afecta de manera crónica al Gran Santo Domingo.

El anuncio fue realizado por el ministro de la Presidencia, José Ignacio Paliza, quien adelantó que las acciones serán “disruptivas, pero necesarias” para comenzar a enfrentar el desorden del tránsito en la capital. Paliza informó que estas iniciativas fueron estudiadas durante ocho meses con la asesoría de expertos internacionales y que serán dadas a conocer en su totalidad en las próximas semanas, antes de su puesta en marcha.

A pesar de los esfuerzos comunicacionales del INTRANT, la población capitalina no ha percibido mejoras significativas en la circulación urbana. Morrison, ingeniero eléctrico de formación, ha sido criticado por sectores técnicos y ciudadanos por no implementar soluciones contundentes frente al caos que se vive a diario en las principales avenidas del Distrito Nacional. «No ha dado pie con bola», se comenta en los pasillos del transporte público.

Entre las primeras medidas que han trascendido, se encuentra la prohibición del giro a la izquierda en puntos estratégicos como la intersección de las avenidas Winston Churchill y 27 de Febrero, uno de los cruces más conflictivos de la ciudad. Aunque ya se ha colocado la señalización correspondiente, la implementación total del proyecto aún no tiene fecha definida.

El INTRANT plantea que los conductores que deseen girar a la izquierda en esa intersección deberán realizar un retorno en U en la intersección de Sarasota con Jiménez Moya. Sin embargo, en esa zona también se reportan embotellamientos constantes, lo que genera dudas sobre la eficacia real del plan.

Además, se ha modificado la señalización en la avenida John F. Kennedy, eliminando el giro a la izquierda hacia la Abraham Lincoln, otra medida que ha generado opiniones divididas entre los conductores.

Mientras tanto, el Gobierno parece decidido a tomar las riendas del problema con un enfoque más ambicioso, frente a lo que muchos consideran una gestión fallida del actual director del INTRANT. La ciudadanía espera que, esta vez, las acciones anunciadas se traduzcan en mejoras tangibles en la movilidad urbana.